A finales del año 2016 Alejandra M. H. Cardiel comienza la investigación y planeación de lo que sería convertido su sueño realidad la apertura de una cafetería, motivada por el amor al café, el gusto por la gastronomía tal vez podría decirse así, heredadas por: su abuelo Alejandro Cardiel Vidales quien era amante por las buenas comidas y un experto en realizarlas; por su bisabuelo Enrique Cervantes quien elaboraba pan de recaudo, un oficio tan trascendental, quien muriera trágicamente un día cuando llevaba su pan por la madrugada, como era su costumbre, desde la localidad de Tingambato a San Juan Tumbio. Su hija Oliva Cervantes teniendo 3 años de edad le gustaba tanto el pan que hacía su papá, que no se dormía si no tenía un pan de concha bajo la almohada. La bisabuela Rosaura Oropeza Raya quien quedara viuda con 5 hijos del 11, emigró a Paracho y por las circunstancias ella no continuó haciendo el pan que hacía su esposo Enrique, ella sin embargo hacía pan de torta para vender entre semana, los sábados y domingos fue famosa por sus enchiladas tradicionales, y la conocieron como Doña Rosita.
Es así que el 26 de Julio de 2017 se abrió al público Café Cafeto con la ilusión y el propósito firme de brindar calidad y variedad de café de diferentes estados de la República Mexicana; elaborando en casa los postres y los panes dándole a cada preparación el sabor que lo distingue se ha ido mejorando la variedad de sus productos por la necesidades y gustos de los clientes.